Aunque el prensado de discos es una tecnología muy antigua, se han introducido modificaciones para hacerla más eficaz, como las prensas controladas electrónicamente. El principio básico es que empezamos con una prensa hidráulica equipada con dos moldes precalentados y dotados de estampadores (que contienen la música).
El vinilo precalentado se introduce en la máquina, se intercala entre dos etiquetas completamente secas y las estampadoras se copian exactamente en el vinilo. Durante este proceso, las etiquetas y la materia de vinilo se prensan bajo una presión de 100 o más toneladas a una temperatura de 160 °C (345 °F).
Una vez que el molde de prensado se ha enfriado lo suficiente, se abre la prensa y se extrae el disco de vinilo, se recorta al tamaño requerido y se inspecciona visualmente.
